Aunque las exportaciones francesas de productos lácteos continúan al alza, Francia está perdiendo cuota de mercado dentro de la UE, según un estudio de FranceAgriMer dedicado a los intercambios franceses de productos lácteos con la Unión Europea.
Francia, segundo productor de leche de vaca de la UE, por detrás de Alemania, cuenta con amplias disponibilidades para exportar. Sin embargo, desde que se eliminaron las cuotas lácteas, la competencia se ha acentuado considerablemente en Europa, donde muchos países (principalmente Irlanda, Bélgica, Polonia, Holanda, Dinamarca y el Reino Unido) han incrementado su producción y, con ella, sus exportaciones. En consecuencia, subraya el informe, estos países son competidores de Francia tanto en el mercado francés como en el mercado comunitario, lo que ha tenido un impacto en el nivel de las importaciones y de las exportaciones galas.
En 2019, solo el 11% de su excedente comercial en valor procedió de sus intercambios con la Unión Europea. En 2016 el porcentaje era del 31% y en buena parte de la década de 2020 superaba el 50%.
El 60% de las exportaciones a la UE
A pesar de esa evolución, el resto de la UE sigue siendo el primer destino de los productos lácteos franceses, con un total del 60% de las exportaciones en valor. También la UE es su primer proveedor, ya que el 98% de las importaciones francesas de lácteos proceden de otros Estados miembros.
El estudio de FranceAgriMer señala que Francia está en buena posición si se le compara con sus principales competidores tanto de la UE como países terceros en el mercado mundial. Tiene algunos elementos a su favor: industrias lácteas modernas, que fabrican una amplia gama de productos, tienen dimensión internacional, exportan a muchos países en todos los continentes y están bien implantadas en el exterior. Sin embargo, las industrias lácteas francesas están invirtiendo actualmente más en el exterior que en territorio nacional. Con ello, añade el estudio, se aseguran la influencia del sector lácteo francés a nivel internacional, o pueden facilitar el acceso a nuevos mercados, pero también hacen la competencia a los productos lácteos franceses en estos mercados y pueden ser un freno a sus exportaciones.
España entre los principales destinos
España figura entre los principales destinos de las exportaciones francesas de productos lácteos, pero ya no en las posiciones de cabeza. Por ejemplo, es el cuarto mercado en el caso de los quesos, el sexto en los productos grasos sólidos, como la mantequilla, el cuarto en los productos frescos (como la leche líquida o los yogures) y el cuarto también en los secos (como las leches en polvo).
En el caso de los productos grasos sólidos España era el primer destino de las exportaciones galas en 2012. Absorbía el 30% del total. En cuanto a los productos frescos, en 2012 España era el segundo mercado de Francia pero el año pasado su cuota era del 11,2%, diez puntos menos.
Fuente: https://www.agropopular.com/
