Opinión: Precio de los alimentos: el factor chino

Opinión: Precio de los alimentos: el factor chino

A nadie le pasa inadvertido, cuando realiza sus compras diarias, que el precio de los alimentos ha aumentado de manera muy importante en los últimos meses. Conforme al índice de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, entre febrero de 2021 y febrero de 2022, los precios mundiales incrementaron en más de un 20%. Los productos con subidas más marcadas son aceites vegetales, cereales, lácteos y carne.

Las causas tras el fulgurante aumento del precio de los alimentos son, por supuesto, diversas. Los ajustes en las cadenas productivas consecuencia de la pandemia del SARS-CoV-2, los fenómenos climáticos adversos en algunos países productores clave, o el aumento del costo del transporte marítimo han sido las más señaladas. No obstante, de manera cada vez más notoria despunta el incremento del precio de los insumos agrícolas y, en particular, de los fertilizantes.

El fertilizante más utilizado tanto en Chile como en el mundo es la urea, sólido granulado que se distingue por el alto contenido de nitrógeno en su composición, cuya presencia es esencial en los suelos para el crecimiento de las plantas. Rusia y China son los productores y exportadores de urea más relevantes a nivel internacional. La guerra de Rusia con Ucrania se prevé limite la capacidad rusa de exportación de urea, lo que a su vez incida aún más en el precio de los fertilizantes y por tanto de los alimentos.

China relumbra en este escenario como proveedor clave. Sin embargo, el país había tomado previamente al conflicto bélico la determinación de privilegiar el mercado interno, para potenciar la producción de forraje animal y, por ende, de carne. Esta decisión se relaciona con el significativo aumento que el consumo de carne, especialmente de vacuno, ha tenido en China en los últimos años, para cuya satisfacción depende de países como Brasil o Uruguay.

Específicamente, desde mediados de 2021 el gobierno chino implementó medidas concretas que limitaban la exportación de fertilizantes, como mayor inspección de los cargamentos.

Sin embargo, a fines de año, a la vista de la oportunidad que supone la escasez de fertilizantes para la exportación, pero sin perder de vista la provisión interna, el gobierno chino anunció un paquete de medidas de apoyo a las empresas productoras facilitándoles, principalmente, el acceso a energía.

Chile, dada su vocación agrícola, así como la alta dependencia de la importación de fertilizantes, ha enfrentado la subida de su precio con especial preocupación. Además, el país es importador neto de cereales, cultivo especialmente afectado, como ya señalamos. El diálogo con China considerando la relación de colaboración que une desde hace décadas a ambos países es esencial. Esta es una problemática urgente, que no afecta sólo a los agroexportadores, sino que también a los pequeños productores que no pueden enfrentar los costos adicionales, así como a todos los consumidores.

Por: Sofía Boza, Facultad de Ciencias Agronómicas e Instituto de Estudios Internacionales, U. de Chile

Fuente: https://www.df.cl/