Es imperativo construir una industria láctea sólida y sostenible, tanto en términos medioambientales como sociales, para lo que es imprescindible que lo sea también en términos económicos.
Así lo planteó el presidente de la Federación Nacional de Industrias Lácteas de España, Ignacio Elola, durante un evento en el cual se reflexionó sobre la actual necesidad en el sector lácteo de atender temas tan relevantes como la competitividad o el medio ambiente desde la sostenibilidad.
De acuerdo con el directivo, en una nota del portal mundolacteo.es, esa visión implica remunerar de forma justa a todos los eslabones de la cadena. “Debemos crear valor para poder repartirlo”, señaló.
Elola hizo hincapié en la importancia de los contratos lácteos y la estabilidad en las relaciones comerciales entre todos los miembros de la industria láctea, en especial entre ganaderos y fábricas de transformación
Así mismo, destacó el potencial de competitividad que ofrece la sostenibilidad dentro del sector, aunque advirtió sobre la necesidad de tener en cuenta los costos y los plazos reales que conlleva este tipo de transformación industrial. Elola subrayó la trascendencia de reivindicar los verdaderos valores en los lácteos para concienciar a los consumidores de que un precio justo permite retribuir a toda la cadena de manera justa.
Por su parte, la directora de sostenibilidad de la Corporación Alimentaria Peñasanta (CAPSA), Estefanía Iglesias, manifestó que “la industria láctea tiene un compromiso con la sostenibilidad que roza la excelencia. Somos un sector muy innovador que lleva años realizando grandes esfuerzos en esta materia”.
Destacó la importancia de que cada eslabón de la cadena sea debidamente pagado y el compromiso de la industria láctea con la sostenibilidad. Agregó que la economía circular, el consumo responsable de agua o la transición hacia fuentes de energía renovables son acciones directas y concretas que el conjunto del sector productivo lácteo puede asumir.
Los 11 pilares para la sostenibilidad
Global Dairy Agenda for Action lleva varios años trabajando para ayudar al sector lácteo mundial a innovar y generar herramientas e iniciativas que fomenten la sostenibilidad del sector desde una perspectiva holística: respeto por el medio ambiente, económicamente viable y socialmente responsable.
En este contexto, surge el marco de trabajo para la sostenibilidad del sector lácteo, que define 11 categorías principales sobre las que trabajar de manera global. Cada país o entorno particular priorizará, de entre estas categorías principales, aquellas que se adapten a sus características particulares y podrá crear otras que respondan a su realidad concreta.
Emisiones de gases de efecto invernadero. Reducción de las emisiones de gases invernadero en toda la cadena de valor del sector lácteo, a través de mecanismos económicamente viables.
Nutrientes del suelo. Gestión de la aplicación de nutrientes en los pastos, para minimizar su impacto en el agua y el aire, manteniendo y mejorando al mismo tiempo la calidad del suelo.
Residuos. Reducir al mínimo la generación de residuos. Cuando sea inevitable, se reutilizan y reciclan.
Agua. Gestión responsable del uso y calidad del agua durante toda la cadena de valor de los productos lácteos.
Suelo. La calidad y la retención del suelo se gestiona y mejora de manera proactiva para garantizar una productividad óptima.
Biodiversidad. Entender los riesgos y las oportunidades directas e indirectas de la biodiversidad y establecimiento de las estrategias para mantenerla o mejorarla.
Desarrollo de mercado. Posibilitar que todos los participantes en la cadena de valor de los productos lácteos tengan la capacidad de crear empresas económicamente viables.
Economías rurales. El sector lácteo contribuye a la supervivencia y la viabilidad económica de los productores y las comunidades rurales.
Condiciones de trabajo. En toda la cadena de valor de los productos lácteos, los trabajadores operan en un entorno seguro y se respetan y promueven sus derechos.
Seguridad y calidad del producto. Se salvaguarda la integridad y la transparencia de la cadena de suministro de la leche y productos lácteos a fin de garantizar su calidad, aporte nutricional y seguridad óptimos.
Cuidado animal. Los animales productores de leche se tratan con cuidado y respeto; en ningún momento sufren hambre o sed, malestar, dolor, lesiones, enfermedad, miedo o angustia; pueden desarrollar de forma relativamente normal su comportamiento natural.
Fuente: https://www.contextoganadero.com/in
