Lechería Latinoamérica: Una fórmula para crecer

Lechería Latinoamérica: Una fórmula para crecer

A la hora de escribir el capítulo de América Latina de la tercera edición de la Encyclopedia of Dairy Sciences, John McNamara recurrió a tres conocidos profesionales argentinos como Fernando Bargo, Javier Baudracco y Santiago Fariña. El objetivo del editor no sólo era poder brindar información actualizada de la lechería de los países de América Latina (LAC) sino además aportar un análisis del potencial de la región con sus limitaciones y desafíos.

Con este objetivo el profesor emérito de lechería de la Universidad de Washington, les pidió el año pasado a estos tres expertos argentinos que escribieran este capítulo sobre la lechería en Latinoamérica que fue incluido y publicado en la nueva edición de la enciclopedia en septiembre del año pasado.

A continuación, se presentan los consideraciones y reflexiones más importantes del trabajo realizado por ellos.

 

Un escenario mundial favorable

En un contexto de las últimas dos décadas con aumento del comercio mundial de lácteos y caída de subsidios de los países más desarrollados, la producción de leche en América Latina aumentó 42%, una tasa de crecimiento superior a la de los EE.UU. que fue del 38%.

América Latina puede complementar la producción forrajera con el uso racional de suplementos a base de granos, ya que existe una relación conveniente entre el precio de la leche y el alimento en la mayoría de los países de la región. Caracterizar la región no es tarea sencilla dada la cantidad de países, pero aún más importante dado su heterogeneidad de perfiles y sistemas en cada uno de ellos.

El capítulo abarcó trece países de la región que representan el 97% de la producción de leche total y que pertenecían uno a América del Norte (México), cuatro a América Central y el Caribe (Costa Rica, República Dominicana, Honduras y Nicaragua), cuatro en la región Andina (Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela) y cuatro en el cono sur (Argentina, Brasil, Chile y Uruguay).

 

AMERICA LATINA EN CIFRAS

  • 8,4% de la población mundial.
  • 6,8% del PIB global.
  • 2,5% anual creció el PBI en las últimas dos décadas (0,5% menos que el resto del mundo).
  • 110 litros por habitante por año de consumo de leche.
  • 32 personas/km2 de superficie terrestre (casi la mitad del promedio mundial).
  • 81% de la población vive en ciudades (55% en el mundo).

 

UNA REGION DEFICITARIA

América Latina es casi autosuficiente en términos de consumo de leche aunque con situaciones muy dispares. Mientras, México es un país importador neto, Centroamérica y el Caribe no alcanzan la autosuficiencia. Por su lado, América del Sur en particular Argentina y Uruguay, compensa estos déficits con un superávit.  

La mayoría de los países tienen áreas particulares con excedentes, que se utilizan para abastecer las zonas deficitarias. Así podemos encontrar, la región de Los Lagos y Los Ríos en el sur de Chile, la mayor parte del sur de Brasil y las provincias centrales de México.

Los únicos países que han alcanzado constantemente un superávit anual y, por lo tanto, pudieron exportar volúmenes considerables son Argentina, Uruguay y Costa Rica.

 

Amigables con el medioambiente

Dada la presión ambiental que existe en la mayoría de los países desarrollados que son protagonistas del mercado mundial, para América Latina se abre una gran oportunidad dado que, los niveles de intensificación de los sistemas de producción lechera predominantes en la región todavía están muy por debajo de los puntos de referencia de las regulaciones internacionales para los flujos de nutrientes y las emisiones de gases de efecto invernadero.

 

MARGEN PARA CRECER

Estos indicadores dependen de la carga animal de los sistemas de alimentación de cada país. Los excedentes de nitrógeno y fósforo aumentan drásticamente cuando dicha variable supera las dos vacas lecheras por hectárea. Dado que la mayoría de los sistemas productivos en LAC están por debajo de ese nivel de carga animal, existe una ventana más amplia para el crecimiento de la productividad en esta región en comparación con Europa, Oceanía o los Estados Unidos.

Una cultura lechera disponible para trabajar

Mientras otros países y regiones en el mundo se debaten con el desafío de conseguir empleados para sus establecimientos, en los países de la región existe una fuerza laboral capacitada relativamente importante y además familiarizada con las prácticas de manejo de los animales o de la producción lechera.

COSTO LABORAL.

En una perspectiva global, el costo del trabajo por unidad de tiempo es relativamente menor en comparación con otras regiones Antecedentes de esta cultura láctea se pueden encontrar en muchos países de América Latina donde la producción lechera ha existido durante más de un siglo o al menos muchas décadas. A diferencia de América del Norte, donde el 80% de los establecimientos lecheros utilizan mano de obra inmigrante, los países de nuestra región utilizan mano de obra local y no enfrentan los problemas de disponibilidad decreciente de la mayoría de los países desarrollados.

 

Las mayores limitaciones

A pesar que América Latina cuenta con un contexto favorable en recursos, existen algunas limitaciones generales que actualmente dificultan capitalizar estas ventajas comparativas para alcanzar un potencial de crecimiento sostenible de la producción lechera:

  1. INFRAESTRUCTURA DEFICIENTE: a nivel de establecimiento, las salas de ordeño, los corrales de alimentación, los patios y la infraestructura en general obsoletos están limitando el crecimiento del rodeo lechero y haciendo que la lechería sea menos atractiva para los trabajadores. A nivel comunitario, la mala calidad de los caminos rurales, la disponibilidad de red eléctrica, el acceso a la educación en particular escuelas y educación superior, y servicios –salud, comunicación, internet, etc.–, limitan el desarrollo del sector lácteo.
  • FALTA DE CRÉDITO A LARGO PLAZO: la pobre transparencia y baja credibilidad de los gobiernos en los mercados, junto con economías inestables, dan como resultado una baja disponibilidad de líneas de crédito convenientes para financiar las inversiones necesarias para el crecimiento de la producción lechera.

¿USTED SABIA...?

América Latina produce 78.238 millones de kg de leche al año, lo que representa el 11,4% de la producción mundial total (FAO, 2020). De los 39 países que producen leche en la región, trece representan el 97% de la producción total y sólo cuatro de ellos –Argentina, Brasil, Colombia y México– representan el 80% de la producción total.

 

La pastura, una oportunidad

En el contexto global descrito anteriormente, el sector lácteo en los países de América Latina (LAC) pueden tener algunas ventajas comparativas:

  • POTENCIAL DE PRODUCCIÓN DE FORRAJE: En la mayoría de las regiones donde se produce leche en LAC existe un clima favorable, suelos fértiles y disponibilidad de agua para producir alimentos para el ganado lechero. La mayoría de estos países se encuentran dentro del rango de latitud con la producción primaria neta más alta de biomasa según la FAO, aunque esa producción de biomasa no se ha utilizado en su totalidad para transformarla en productos de proteína animal. Este potencial de producción de forraje a bajo costo, combinado con un aumento en el número de vacas, brinda un enorme potencial para aumentar la producción de leche de manera competitiva.
  • MAS NATURAL Y AMIGABLE: la producción de leche en LAC proviene en gran medida de sistemas productivos basados en el pastoreo al aire libre. Es probable que estos sistemas coincidan con las preferencias de las nuevas generaciones de consumidores que buscan alimentos producidos de una manera que se perciba como más natural que los sistemas confinados.
  • ALTO MARGEN DE MEJORA: Existe una gran brecha para el crecimiento de la productividad lechera en los países de ALC, tanto en términos de tamaño de los rodeos como de producción individual.

Fuente: https://infortambo.cl/