Costos de producción de forraje suben un 50% esta temporada

Costos de producción de forraje suben un 50% esta temporada

AGRO. En plena época de cosecha de praderas, quienes se dedican al ensilaje en bolos o parva, deben afrontar los altos precios de los insumos, principalmente el petróleo y el nylon o film. El precio final subió al doble.

La agricultura es un sector de la producción de carácter vital, por lo que no puede detenerse. Pese a que en este último año ha debido enfrentar los altos costos de producción, la actividad continua y uno de los cultivos que cosechan en esta época es el pasto que se conserva en el invierno para poder alimentar el ganado y mantener la producción lechera especialmente.

Profesionales que se dedican específicamente a la producción de forraje, tanto al cosecharlo como darle un formato para la venta, coinciden que que el alza en el precio del petróleo, combustible del que dependen para trabajar con la maquinaria, además del plástico para ensilar, están entre los insumos que más han subido para esta actividad, pero que son elementos de los que no se puede prescindir, ya que en general hay una buena producción esta temporada, la que debe ser asegurada, conservándola para el invierno.

 

CUESTA EL DOBLE

Cristopher Klocker es ingeniero agrónomo y trabaja en la prestación de servicios; además siembra pasto para vender forraje de cara al invierno, por lo que comentó que esta temporada ha ido un poco más baja que la pasada.

"Lo más importante a destacar en relación al año pasado, es cuánto va a costar el kilo de forraje, y todo eso es por los insumos. Lo que es el costo de malla, el plástico y el petróleo hizo que el bolo este año, en sólo hacerlo, cuesta más del 50% de lo que valía el año pasado. El 2021 hacer un bolo costaba aproximadamente entre $12 mil y 14 mil pesos, mientras este año se encuentra entre $20 mil y 21 mil pesos", explicó.

En paralelo, todos los otros insumos para producir también han subido sus precios, como por ejemplo las semillas y los servicios de fumigación.

"Nuestro principal cliente es Manuka, ellos siempre han comprado harto, pero este año he notado que están haciendo más forraje en sus campos, intentando compra un poco menos; pero aún así, en vista a cómo se viene el verano, están comprando bastante. Los productores chicos, en cambio, están tratando de comprar ahora para no hacerlo en invierno, ya que es más caro", explicó.

Klocker indicó que la cosecha de pasto dura hasta diciembre o enero, aunque este año la primavera llegó más tarde, ya que por ejemplo el año pasado la temporada partió en septiembre, en cambio ahora partió en octubre, unos 15 ó 20 días después.

"El problema es que vamos a tener una primavera más corta, porque si partimos más tarde no significa que vamos a terminar más tarde, porque la sequía empezará casi igual que el año pasado, a fines de diciembre", manifestó Klocker.

 

ALIMENTO IRREMPLAZABLE

Leonardo Orrego, quien también es prestador de servicios agrícolas y productor lechero, comentó que las faenas se debieron retrasar por el exceso de lluvia, como también el tener que enfrentar los altos costos de producción, por lo que una de las estrategias para enfrentar esto último es cambiar de silos en formato de bolos al silo parva, ya que es más barato. Según explicó, el primero lleva un film o nylon que lo envuelve, producto que actualmente tiene un muy alto precio.

En cuanto a la demanda actual que tiene el forraje, Leonardo Orrego señaló que hay bastante interés, aunque lo que generalmente se comercializa es el bolo; no obstante ahora esa venta está más lenta precisamente por el alza de este producto, por ello en este momento es requerido más que nada por empresas grandes, como es el caso de Manuka.

"Generalmente si uno gasta 20 mil pesos por hacer un bolo, en servicio completo, la venta se transa en el doble, en 40 mil pesos. Las ventas están un poco frenadas, porque la mayoría está esperando ver si en sus propios predios logran satisfacer sus necesidades y compran solamente el saldo. Pero tampoco se sabe si va a volver a llover, si va a haber otro corte, lo que regula un poco el mercado", remarcó.

Agregó que si no llueve, no habrá más cortes y como los costos están tan altos, tampoco hay otras prácticas para hacer forraje, como por ejemplo sembrar tritricaleso centeno, ya que los insumos para ello también son muy caros.

"El problema también ha estado en que como el verano pasado fue seco, se empezó a ocupar la comida en verano, por lo tanto cuando en invierno la gente empieza a rezagar pastos para cortarlos a la salida del invierno a primavera, se los tuvo que volver a comer; y de un talajeo de animales o un corte, pasan 30 días", explicó.

 

ALZA POR SOBRE EL 50%

El también prestador de servicios agrícolas que se dedica a la producción de forraje, Diego Catalán, comentó que ha sido una buena primavera para esta actividad, ya que las temperaturas han sido buenas, con una humedad óptima.

"Han habido bastantes lluvias intermitentes que han permitido la humedad en el suelo, para que las praderas y los forrajes tengan un muy buen desarrollo. Aquí en esta época se juega toda la guarda de forrajes del invierno que viene, así que en ese sentido ha sido bien provechoso, porque hay bastante pasto", expresó.

Catalán agregó que por estos días estamos en el peak de praderas a nivel de la zona de Los Ríos y Los Lagos, donde todos los prestadores trabajan a toda máquina, aunque deben enfrentarse al factor negativo que es el costo de producción.

"Aquí el único factor que ha cambiado y que ha sido una competencia muy alta son los costos de producción, tanto para el agricultor como para nosotros los que prestamos servicios en la cosecha de forraje, porque están muy altos en comparación hace tres años atrás", manifestó Catalán.

El profesional detalló que el año pasado los costos de producir forraje ya habían subido un 30% sobre el 2019 y 2020, mientras que ahora se agrega un 30% más sobre el valor que tuvo en los periodos anteriores.

"Ya estamos en un acumulado de más del 50% en el aumento de los costos de producción de forraje de confección de éste en todos los campos. Sin duda el insumo que más ha subido es el combustible, pero el que más ha encarecido todo es el plástico o film para guardar y conservar los bolos", concluyó.

Por Paola Rojas

 

Fuente: El Diario Austral de Osorno